“Se interrumpió la trayectoria de aumento de la inversión agrícola que se había observado en las cuatro campañas anteriores”, informó el Cr. Darío Andrioli en Agronegocios Sarandí, analizando los datos del Idima al cierre del año agrícola.
El Índice de Inversión de Maquinaria Agrícola (Idima) es un trabajo que viene realizando el estudio Carle & Andrioli hace tres lustros, y en esta oportunidad el dato revelado es que se cortó la trayectoria de aumento que se venía viendo en las cuatro campañas anteriores.
“Estaba creciendo a tasas importantes, en promedio el 40% anual desde la campaña 2019/2020, pero hubo un contexto menos favorable que revirtió lo que se venía dando”, señaló el Cr. Andrioli.
INVERSIÓN AGRÍCOLA
El Índice de Inversión en Maquinaria Agrícola es elaborado por el estudio, con base en información de los valores importados de equipos agrícolas de la Dirección Nacional de Aduanas.
Según Andrioli, esta baja interrumpió la tendencia de aumento de la inversión agrícola. En la última zafra, por razones de clima y mercados, se ajustaron las expectativas de los productores agrícolas y la incorporación de máquinas y equipos descendió.
“Tuvimos una muy mala cosecha de verano y también se produjo una caída importante en el valor de los granos”, explicó.
Fuente: IDIMA- Elaboración propia con base en datos de la Dirección Nacional de Aduanas
Los valores importados de equipos agrícolas que componen el índice totalizaron U$S 179 millones, mientras que el año anterior había sido de U$S 269 millones.
Por clase de maquinaria, los mayores montos de inversión correspondieron a tractores 39% y cosechadoras 37%.
De acuerdo al informe, descendieron todos los componentes del índice, siendo los equipos de mayor caída los tractores (43%).
La baja de inversión agrícola se dio a partir de marzo de 2023, por el impacto de la sequía en los rendimientos productivos, y que el mayor descenso fue en el primer semestre de la zafra con caída interanual de 47%.
Asimismo el informe establece que en la zafra descendió el área cultivada y la inversión en maquinaria agrícola, aunque ésta lo hizo a mayor ritmo, por lo que bajó la inversión por hectárea sembrada.
Este indicador, importante en el mediano plazo para la producción de la agricultura, en la campaña fue de U$S 88 por hectárea, con un descenso de 27% respecto a la anterior.
CONTEXTO Y PERSPECTIVAS
La zafra 2023-24 estuvo caracterizada por menores precios internacionales de los productos agrícolas, ya que el precio promedio de los cereales fue 16% inferior a la media de la campaña agrícola anterior, de acuerdo con el índice de precios de FAO.
Destaca la caída de los precios de la soja de 19% y del trigo de 23% en los últimos doce meses, mientras que el precio del arroz aumentó 23%.
En ese marco general de menores precios, en la última zafra agrícola la superficie sembrada se ajustó a la baja, siendo 10% inferior a la anterior.
El descenso de área de la zafra se debe a los cultivos de invierno: trigo 12%, cebada 10% y colza 62%.
Fuente: Elaboración propia con base en datos de Estadísticas Agropecuarias MGAP
La zafra cerrada en junio 2024 estuvo caracterizada por la normalización de los rendimientos productivos, en relación a la campaña anterior impactada por la sequía. Las toneladas producidas aumentaron 46% en relación con la zafra anterior, cuando había caído 30%, por lo que las cantidades producidas se sitúan en niveles de la zafra 2021-22.
Respecto a las perspectivas para la zafra 2024-25, el informe de Carle & Andrioli indica que la caída de inversión agrícola se moderó en los últimos meses e incluso en junio fue mayor a igual mes de 2023, lo que permitiría tener expectativas de que la inversión en maquinarias agrícola recupere su dinamismo en la nueva zafra.
Con respecto al futuro del Idima, Andrioli señaló que muy probablemente se incluyan los equipos de riego en la evaluación.