De todos modos, el jefe de Acceso e Inteligencia de Mercados de INAC admitió que “es más especulación que otra cosa, porque no sabemos demasiado y hay pocos antecedentes de incorporación de nuevos miembros”.
El ingreso de Uruguay al Acuerdo Transpacífico podría generarle a la cadena cárnica entre U$S 50 y U$S 100 millones, aunque según el economista Álvaro Pereira Ramela, jefe de Acceso e Inteligencia de Mercados del Instituto Nacional de Carnes (INAC), “es más especulación que otra cosa, porque no sabemos demasiado y hay pocos antecedentes de incorporación de nuevos miembros”.
Entrevistado por Agronegocios Sarandí, el economista resaltó la importancia de ingresar al Acuerdo Transpacífico, aunque relativizó un impacto inmediato, ya que considera que hay otros países esperando para ingresar y los tiempos hablan de por lo menos dos años, inicialmente.
Sobre la intención de Uruguay de ingresar al Acuerdo Transpacífico (presentada por el canciller Francisco Bustillo en Nueva Zelanda) y su importancia, Pereira indicó que “es un acuerdo que tenemos muy estudiado, porque explica en buena manera por qué nuestros competidores hacen cosas que nosotros no hacemos tanto”.
Exportaciones con mayor intensidad
“Cuando me refiero a cosas, en general estoy pensando en exportar con mayor intensidad a Japón, Canadá, Vietnam y Malasia. Eso es lo que está sobre la mesa. Este acuerdo genera preferencias muy importantes con esos mercados, y los que no tienen este acuerdo tienen que pagar aranceles bastante más elevados”, explicó.
Agregó que “el mercado más importante es Japón, es el tercer mayor importador del mundo. Los que no tenemos acuerdo comercial pagamos impuestos de 38%, pero los que están en este acuerdo pagan 23% al día de hoy, y en el futuro cercano van a estar pagando menos de 10%”.
Pereira Ramela señaló que “entonces van a quedar con una preferencia de 30% en materia de impuestos aduaneros, que ciertamente tiene un poder para discriminar a los competidores, en este caso Uruguay, que es bien importante”.
Por lo tanto, “entendemos que la incorporación” de Uruguay a este acuerdo “podría generar U$S 50 millones pensando en un escenario conservador”.
“Si Uruguay logra aumentar su producción, realmente el cielo es el límite”.
El economista puntualizó que esta cifra es “solo teniendo en cuenta Japón y algo de Canadá. Lo más interesante sería que productos que están yendo a China empiecen a ir a Japón y a Canadá. Pero también se generarían otras situaciones en la medida de que hay más destinos abiertos”.
Consideró que “esto debería colaborar con menores volatilidades en los precios, más diversificación y, por qué no, pensar en que Uruguay aumente su producción. Entonces, los escenarios de riesgo de comercio son en el orden de U$S 50 a U$S 100 millones. Pero si Uruguay en temática lógica virtuosa logra aumentar su producción, realmente el cielo es el límite”.
Sobre la posibilidad cierta de ingreso, Pereira dijo que “primero, para nivelar información, es interesante mencionar que no tenemos muchos antecedentes; es un acuerdo relativamente nuevo. Los 11 países originales todavía lo están incorporando a su marco normativo. Hay ocho países que ya lo tienen incorporado, y este acuerdo solamente ha tratado una solicitud de incorporación, que es la de Reino Unido, que va a demorar dos años”.
Solo especulación
Pereira enfatizó que “luego es todo bastante especulativo respecto a cómo nos puede ir. Hay cinco países que solicitaron la incorporación: China, Taiwán, Ecuador, Costa Rica y Corea del Sur, y esos procesos todavía no comenzaron”.
“No sabemos con qué orden los van a tratar, ni cuánto va a durar cada proceso. En fin, lamento tener que decir que es más especulación que otra cosa, porque hay pocos antecedentes de incorporación de nuevos miembros”, admitió.
El economista agregó que “en esa lista están Indonesia y Tailandia y el que sí está dentro es Vietnam”. Consideró que si Uruguay llegara a entrar al Acuerdo Transpacífico, el arancel bajaría en Vietnam de 12% a 0%, y recordó que ese mercado no está abierto para Uruguay por razones sanitarias.
Vietnam: una plaza interesante
Pereira agregó que “es interesante hablar de Vietnam porque los dos temas de agenda de acceso a mercados están presentes en ese mercado. Por un lado hay un arancel que no es tan alto (el 12%, que es lo que pagamos en China). La cadena cárnica uruguaya trabaja con estos aranceles, pero está el arancel por un lado y por otro la habilitación sanitaria. Vietnam tiene estos dos asuntos en gestión”.
Explicó que en materia sanitaria “la carne bovina uruguaya está presente en el 88% de los mercados, y en la lista de los lugares donde no estamos aparece una región con bastante fuerza: el sudeste asiático. Ese es un lugar del mundo donde no tenemos la habilitación sanitaria”.
“INAC ha estimulado mucho, ha hecho muchos análisis y ha intentado mostrar las virtudes comerciales del sudeste asiático”
“En ese sentido –agregó– INAC ha estimulado mucho, ha hecho muchos análisis y ha intentado mostrar las virtudes comerciales de esa región, en general. Pero específicamente de Indonesia y Vietnam, ya que la mitad de la importación es de esa región. Y ahí creemos que hay muchas cosas para hacer y que son mercados bien interesantes”.
Libre de fiebre aftosa con vacunación
Sobre el trabajo que viene realizando Uruguay para demostrar que los animales vacunados contra la fiebre aftosa son libres de la enfermedad y que generan, además, muchas más garantías para el comprador.
Pereira señaló que además del sudeste asiático, “nos falta poder exportar productos con hueso a mercados de alto valor, que realizan algún tipo de discriminación, porque Uruguay vacuna contra la aftosa”.
“Son 10 países: Estados Unidos, Canadá, México, Chile, Suiza, Israel, Corea y Japón. Esos serían los países que realizan esta discriminación. De cualquier manera, hay que decir que los grandes son Estados Unidos y muy llamativamente Corea. Este es un gran importador de asados, tiene mucho que ver con su cocina tradicional el corte con hueso”, describió.
La importancia de Corea
“Lo más interesante de Corea para Uruguay este año –señaló Pereira–, fue la habilitación para poder exportar recortes y trimming. Uruguay está en un proceso de demostrar confianza y en un ciclo positivo con Corea”, dijo.
Agregó que “en materia de la normativa internacional de sanidad animal, cuando uno va a la Organización Mundial de Sanidad Animal, en realidad no hay ningún tipo de recomendación que estimule la importación de productos con hueso de países donde se vacuna”.
Comentó que “lo cierto es que cada país que nos discrimina, lo hace por normativas domésticas. Entonces, en realidad deberíamos entrar en diálogo con cada país, para ver cada normativa, y saber por qué se opta por tomar esta decisión más prudente que lo que recomienda la legislación internacional”.
“Entendemos que es un momento propicio para hablar del tema, y este tipo de disrupciones complican a toda la cadena. La idea de hacer un sistema más resiliente, que maneje mejor los shocks y los problemas. Hoy en día, si hubiera un problema tóxico en algún país, habría algún brote. Eso realmente significaría una extorsión comercial significativa”, consideró.
Los mercados abiertos
Pereira señaló que “Uruguay hace esta argumentación de estimular el comercio desde países que están vacunando, también con el objetivo de que todo el sistema sea bastante más estable. Más allá de que algún exabrupto sanitario, genere una oportunidad comercial de corto plazo, en el largo plazo es más el problema que otra cosa”.
“Hay mercados que están abiertos en términos sanitarios, con aranceles que no son altos e igualmente Uruguay está poco presente”
Pereira reflexionó que “también hay mercados que están abiertos en términos sanitarios para Uruguay, con aranceles que no son altos e igualmente el país está poco presente”.
En ese sentido, consideró que “la región que queda bastante marcada en el mapa es el Medio Oriente. Ahí Uruguay tiene todo abierto, los aranceles no son altos y cuando hay aranceles son los mismos para la competencia, pero vemos que la competencia opera muy activamente y nosotros no tanto”.
Pereira señaló que “ahí la decisión del INAC fue participar en distintas ferias comerciales”, como las de Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, y “estimular el intercambio, acercar a algún importador e invitar delegaciones”.
“Hacer una delegación de Emiratos Árabes durante la exposición del Prado; colaborar en ese sentido, y que el sector privado evalúe la conveniencia de cada propuesta”, señaló.
El economista dijo que le parece “interesante” que en carne bovina Australia exporta el 10% a Medio Oriente. A propósito, sostuvo que esos mercados “no son para despreciar”, ya que “pueden dar una solución y una alternativa interesante”.
El potencial de la carne aviar
Con relación al potencial que tiene Uruguay para exportar carne aviar, Pereira dijo que “en materia de acceso a mercados, la carne aviar hace un par de años podía acceder a países que eran el 4% de mercado importador”.
En tal sentido, se refirió a algunos países africanos y a algún otro país de América Latina. “Realmente no teníamos posibilidad. Hoy estamos más cercanos al 15%, porque hubo dos procesos de habilitación importantes: Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos. La de Arabia Saudita nos pondría en una situación más intermedia”.
“Toda la importación de carne aviar de Arabia Saudita equivale a ocho veces la producción uruguaya”
A propósito, destacó que “el país está habilitado y en proceso de registrar las plantas, lo cual entendemos que es relativamente inmediato. Emiratos Árabes está en una situación muy similar. Pero esto me parece fundamental. Sería como la noche y el día, serían dos países que importan el 10% de la carne aviar. Estamos viendo también que en materia de precios, por lo menos para el pollo entero, son de los más interesantes”.
Pereira enfatizó que “toda la importación de carne aviar de Arabia Saudita equivale a ocho veces la producción uruguaya. Estamos hablando de otra proporcionalidad. Estaríamos ante algo realmente muy grande”.