El recrudecimiento –o el sinceramiento– de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que hace peligrar las ventas del grano estadounidense 2025/2026 al principal comprador mundial, hizo que este viernes la soja terminara la jornada – y la semana-, con precios a la baja en Chicago.

La cronología de este nuevo estado de situación tuvo su primer hito el pasado jueves 9, cuando el gobierno chino anuncio una serie de medidas restrictivas para las exportaciones de tierras raras, señala un informe de la consultora argentina Granar.

Y, se sabe, se trata de materiales estratégicos para sectores tecnológicos y armamentísticos (además de una obsesión para Trump, que ya tiene prioridad para explotarlas en Ucrania y que las espera conseguir en Argentina), y para equipos necesarios para su procesamiento.

En rigor, ahora China impone licencias especiales que deberán ser tramitadas por los exportadores

A esto se agregó que este viernes Pekín confirmó la imposición –desde el martes próximo– de mayores tasas portuarias a los buques vinculados con Estados Unidos que arriben a sus puertos.

Esto es en represalia a una medida similar adoptada por el gobierno estadounidense el 17 de abril que entrará en vigor también el martes contra barcos con bandera china y buques construidos en China.

La respuesta de Donald Trump a ambos hechos no se hizo esperar, justo el mismo día en que el magnate se quedó sin el deseado Nobel de la Paz.

«¡Están sucediendo cosas muy extrañas en China! Se están volviendo muy hostiles y están enviando cartas a países de todo el mundo para anunciar que quieren imponer controles de exportación a todos los elementos de producción relacionados con tierras raras, y prácticamente a cualquier otra cosa que se les ocurra, incluso si no se fabrica en China. Nadie ha visto algo así, pero, en esencia, congestionaría los mercados y dificultaría la vida a prácticamente todos los países del mundo, especialmente a China», escribió el mandatario en Truth Social, en una muy particular lectura de los hechos.

En UN extenso mensaje, Trump advirtió que se verá obligado a contrarrestar financieramente la acción del gobierno chino

«Una de las políticas que estamos calculando en este momento es un aumento masivo de los aranceles a los productos chinos que ingresan en Estados Unidos».

Además, y en un duro golpe para los agricultores estadounidenses que tenían alguna expectativa –y mucha necesidad– de acuerdo con el principal comprador mundial de soja, el presidente de EE.UU. escribió: «Tenía previsto reunirme con el presidente Xi en dos semanas, en la APEC, en Corea del Sur, pero ahora parece que no hay motivo para hacerlo».

En síntesis, y desde el lado de los farmers, una semana que arrancó con la expectativa por el anuncio de ayudas de la Casa Blanca a los agricultores afectados por la guerra arancelaria y por el encuentro entre los presidentes de EE.UU. y de China para buscar una solución al comercio agrícola se cierra sin certezas sobre las ayudas prometidas la semana pasada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y con la cancelación del encuentro entre los mandatarios.

Todo esto, mientras el tiempo seco sobre el Medio Oeste favorece el rápido progreso de la cosecha de la soja.

La semana se cierra sin certezas sobre las ayudas prometidas la semana pasada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, a los sojeros de EE.UU.

«La Asociación Americana de la Soja está profundamente decepcionada por la cancelación de la reunión prevista para finales de mes entre el presidente Trump y el presidente chino, Xi Jinping, debido a las recientes medidas del gobierno chino para restringir aún más el acceso a los minerales de tierras raras. La ASA esperaba que estas próximas conversaciones entre Estados Unidos y China culminaran en un acuerdo que restableciera las exportaciones de soja estadounidense a China”, «, sostuvo en un comunicado la entidad que dice representar a unos 500 mil productores de soja de Estados Unidos.

El documento finalizó señalando que “Las guerras comerciales son perjudiciales para todos y estos últimos acontecimientos son profundamente decepcionantes en un momento en que los productores de soja se enfrentan a una crisis financiera cada vez mayor. La ASA espera que se puedan reanudar las conversaciones para restablecer los mercados y las relaciones comerciales”.

Texto en base a Granar. Foto Xinhua