Las cabañas San Valentín, de Olga Quagliotti e hijos, y La Empastada, de Javier Filliat, realizarán su remate anual este sábado 5 de octubre, en la propia estancia La Empastada, oportunidad en la cual presentarán 60 toros Red Angus y 30 vaquillonas, también Red Angus, preñadas a parir en primavera, todo con datos de Breedplan.

Para los toros, que se ofrecen inmunizados contra garrapata, hay 180 días libres de intereses para el pago, hay un descuento del 6% por pago al contado y flete gratis, y para las vaquillonas el plazo libre de intereses es de 90 días, y el descuento por contado es del 3%. El comprador tiene un 4% de gastos totales.

Una vez más el martillero será Víctor Velazco, y la administración será por cuenta de Agrokap (www.agrokap.com.uy), en cuyo sitio web se pueden ver todos los lotes y preofertar por los mismos. El remate será emitido por  www.rural.com.uy y los negocios comenzarán apenas finalizado al almuerzo, por lo que la familia Filliat Quagliotti espera a los asistentes al mediodía.

La Empastada se ubica en Durazno, sobre la Ruta 19 a la altura del Km. 35, entre Pueblo El Carmen y el comercio de Sáenz.

Según dijo Filliat en Agronegocios Sarandí, “este año estamos con muchas expectativas sobre lo que será el remate, porque hemos recibido muchas consultas, hemos hablado con muchos clientes que ya están decididos a comprar volumen de toros. Es decir, vemos que hay mucho más animo que el año pasado”.

La promoción del remate se refiere a que se trata de “toros para vaquillonas”, producidos 100% a pasto, en base a un sistema que, según su parecer, “es un camino rentable”.

Agregó que, como cabañeros, “estamos convencidos de que es lo mejor para seleccionar animales superiores adaptados al ambiente objetivo. La mayoría del rodeo de cría nacional se encuentra sobre campos naturales”.

Filliat afirmó que “de lo que vemos en un toro, el 70% es dado por el ambiente y el 30 % es genético. El 70% producido por el ambiente no es heredable. En la medida en que hacemos más artificial el ambiente lo único que logramos es confundirnos más ya que estamos influyendo sobre este porcentaje. Cuanto más parecido sea el ambiente donde criamos y terminamos los toros al que van a trabajar en el futuro es mejor, logrando mejores resultados. Vamos a seleccionar y desarrollar una genética adaptada a un sistema productivo 100% pastoril”.

Cuanto más parecido sea el ambiente donde criamos y terminamos los toros al que van a trabajar en el futuro es mejor, logrando mejores resultados

Otro de los conceptos manejados fue el de que “para que un sistema de selección sea exitoso se debe seleccionar en forma objetiva, con grupos grandes y homogéneos de cada generación y en condiciones de alimentación comerciales, lo más parecidas a donde van a trabajar los animales. De no ser así es imposible detectar los animales superiores y mejor adaptados al ambiente”.

“Nosotros consideramos que si un animal va a trabajar y producir comiendo pasto es mejor criarlo, evaluarlo objetivamente y prepararlo a pasto, para no perder rusticidad y mejorar la eficiencia de conversión de la pastura”, consideró.

Filliat informó que luego  de la evaluación genética, nosotros los seguimos solo a pasto para asegúrale al cliente un toro que este bien desarrollado y gordo, pero a pasto, expresando así su máxima adaptación y rusticidad. Transitamos este camino desde hace muchos años y nuestros clientes cada vez lo valoran más. A medida que pasan los años ellos se sorprenden cada vez más de lo buenos que son los toros que compraron, rústicos, gordos todo el año y que producen muy buenos novillos y vacas muy fértiles”.