El consorcio, que remató desde la Escuela de Alta Gastronomía de Maldonado, colocó casi el 92% de los seis mil vacunos ofrecidos.
“El mercado sigue demandante, pero lógicamente tendió a ajustar los valores siguiendo lo que pasa con el mercado del gordo”, fue el comentario general al finalizar la venta 237 cumplida el pasado miércoles 5.
Los terneros eran en su mayoría pesados, arriba de los 200 kgs. y hasta con lotes de 300 kgs., y si bien tuvieron un descenso en el precio promedio con respecto a la venta anterior, al kilo el valor fue mayor.
Eso también aconteció con otras categorías como los novillos de uno a dos y las vacas de invernada, que rondaron los U$S 900 al bulto.
También fueron destacadas las colocaciones en las categorías de terneras, vaquillonas y piezas de cría.
El tiempo sigue siendo un gran aliado, porque “le da dinamismo al mercado”.
Asimismo hubo pleno interés por los lotes de ovinos ofrecidos.
El siguiente cuadro detalla lo que fueron los negocios de esta nueva subasta.









