Si bien se registraron precipitaciones abundantes en este verano, no generaron grandes dificultades en la producción vitícola. “No estamos en una crisis. Este año no ocurrió ni cerca de lo que pasó en 2014, aquella fue una vendimia en barro. Hoy hay algunos problemas pero no son graves. Tuvimos lluvias pero no generaron problemas importantes”, dijo a Agronegocios Sarandí el enólogo José Lez, presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INAVI).
El jerarca señaló que en general la vendimia se está desarrollando con características normales para Uruguay. Los días de sol están ayudando mucho a la maduración de las uvas, que están tomando el color deseado y las uvas blancas ya pasaron la parte más crítica, y todas las variedades finas ya se cosecharon, comentó.
De todos modos Lez reconoció que hubo algunos inconvenientes por exceso de humedad y altas temperaturas. “Al no bajar las temperaturas en la noche algunos hongos detectados en ciertas variedades siguen trabajando”, explicó el enólogo.
En la entrevista realizada este viernes 24 de febrero el presidente del INAVI comentó que cerca de la cuarta parte de las uvas de esta vendimia fueron cosechadas. “Estamos en una cosecha buena, que incluso mejoró en kilos. Las lluvias permitieron una mejor hidratación de las uvas, y la calidad es considerada muy buena, aunque no excelente como las de los años 2015 y 2016”, indicó.
La vendimia 2017 comenzó oficialmente en Uruguay el lunes 20 de febrero, aunque en la práctica ya se había iniciado bastante antes de esa fecha.