Conocida la decisión de la Administración Temer de rehabilitar el ingreso de lácteos uruguayos, se comparte lo que se dijo en la prensa de ese país con respecto a los resultados que tuvo la auditoría del Ministerio de Agricultura en Uruguay para inspeccionar si realmente se hacía triangulación de productos lácteos. Por otra parte, Brasil celebra la apertura del mercado japonés para vender sus propios productos, originados en regiones libres de aftosa sin vacunación.
Después de suspender las importaciones de leche en polvo de Uruguay por casi un mes, el Ministerio de Agricultura decidió retirar la restricción que había sido tomada por tiempo indefinido, dijo al diario Valor Económico, de San Pablo, el secretario de Defensa Agropecuaria de la cartera, Luis Eduardo Rangel.
De acuerdo al funcionario, la decisión fue autorizada por el presidente Michel Temer. Y fue tomada tras una auditoría que se realizó en Uruguay, hecha por fiscales del Ministerio de Agricultura durante toda la semana pasada, no encontrándose indicios de triangulación entre la leche del vecino sudamericano con otros países, como Argentina o Nueva Zelanda, como sospechaban los productores brasileños.
La suspensión de la emisión de toda guía de importación de leche procedente del país vecino fue anunciada por Blairo Maggi tras intensa presión de la bancada ruralista del Congreso y de varias entidades de productores, como la Confederación de Agricultura y Ganadería de Brasil (CNA), la Organización de las Cooperativas de Brasil (OCB) y la Abraleite, que alegaban la falta de control en la entrada de la leche uruguaya en los puertos brasileños.
El episodio, sin embargo, llegó a causar malestar con Itamaraty, después de que el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, se quejara con Temer por teléfono. Temer también quedó constreñido con la situación, ya que Brasil es el actual presidente del Mercosur, como declaró el propio ministro Blairo Maggi hace unas semanas. «El presidente [Michel] Temer ya autorizó la reanudación. «Vamos a comunicar a Uruguay oficialmente la decisión el martes», dijo Rangel.
El secretario también informó que la expectativa es que las importaciones sean restablecidas a lo largo de esta semana. Y agregó que el «bajo flujo de importación» de leche uruguaya en los últimos meses también determinó para que el Ministerio de Agricultura decidiera por la reanudación de las compras del producto.
Las exportaciones de leche de Uruguay a Brasil sobrepasaron las 40 mil toneladas en el primer semestre de este año, mientras que en el mismo período del año pasado alcanzaron 50 mil toneladas. Sin embargo, el objetivo principal de la medida de paralizar las importaciones, aunque de manera temporal, para forzar al gobierno y al sector privado uruguayo a negociar cotas no fue alcanzado, ponderó Rangel en el citado artículo de prensa.
EXPORTACIONES A BRASIL
Por otra parte, y según datos publicados en el portal del propio Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento (MAPA), productos lácteos brasileños que provengan de regiones libres de fiebre aftosa y que cuentan con el Certificado Sanitario Internacional (CSI) accederán en los próximos días al mercado japonés.
Luego de dos años de negociaciones, Brasil va a poder exportar leche y derivados a Japón. La medida fue posible luego de obtenerse el Certificado Sanitario Internacional (CSI). Desde ahora los productos de regiones libres de fiebre aftosa sin vacunación podrán ser comercializados en dicho mercado, dijo un comunicado del MAPA.
Brasil está todavía en etapa de crecimiento en su producción láctea, por eso el establecimiento de empresas que cuenten con la certificación es fundamental.
“Japón es un cliente directo muy importante por el potencial de consumo y por su grado de exigencia, lo que demuestra la capacidad con la que cuenta hoy Brasil para atender esas exigencias”, señaló el secretario de Relaciones Internacionales del ministerio, Odilson Ribeiro e Silva.
A nivel mundial, Japón es el séptimo mayor consumidor de lácteos, lo que representa un mercado sumamente atractivo para los productos brasileños, El año pasado, el país asiático importó productos lácteos por mil doscientos millones de dólares.