El productor agrícola y lechero del departamento de Colonia analizó el impacto de la sequía, pero recordó que en los años anteriores hubo resultados económicos muy buenos, que permitieron hacer caja para enfrentar esta crisis. De todos modos, admitió que la situación financiera de los productores “se va a complicar”.    

Para hablar sobre el impacto de la sequía en la producción agrícola y lechera en el departamento de Colonia, Agronegocios Sarandí dialogó con el productor Darío Jorcín, productor en la zona de Tarariras. Dijo que en este momento “estamos sufriendo y gastando lo que en algún momento pudimos ahorrar. Las perspectivas para adelante son difíciles, porque los precios no están acompañando”.

El empresario señaló que algunos productores están recibiendo “alguna ayuda para paliar la situación, pero son migajas; no ha sido fácil para nadie”. Dijo que “enero pegó fuerte. Veníamos de una situación excepcional, muy buena, los dos años anteriores, tanto en precios como en rindes de cultivos”.

Jorcín sostuvo que “tenemos que estar agradecidos de lo que pasó, pero en este momento la estamos sufriendo y gastando lo que en algún momento pudimos ahorrar. Las perspectivas para adelante son difíciles, porque los precios no están acompañando, por lo menos de la misma manera que pensábamos; en la carne es donde más está pegando”.

Situación financiera

Sobre la situación financiera de los productores, Jorcín advirtió que “se va complicar”. Señaló que “Microfinanzas (BROU) ahora prorrogó los plazos por 60 días más, para aquel que tenía que pagar ahora y lo corrió para adelante”. 

Dijo que “hay pequeñas ayudas, pero en el caso nuestro tenemos recursos de la agricultura que los volcamos para mantener el tambo ahora. Inclusive, no vendí el trigo en su momento porque no me gustaba mucho el precio y hoy lo empecé a (dar de) comer. Para comprar un maíz a U$S 340 puesto y el trigo vale U$S 290 (por tonelada), me lo empiezo a comer. Entonces tengo, por suerte, algún recurso más que otros y la vengo paleando. Pero hablas con otros productores que quieren comprar fardos y no hay”.

“A la vaca no la podés dejar caer, porque comprometes la producción de todo un año”

Jorcín señaló que en este año “se está gastando pero no se va a recuperar enseguida. A la vaca no la podés dejar caer porque después comprometes la producción de todo un año para adelante. Es un desafío bien importante, pero los tamberos uruguayos y los productores estamos acostumbrados a pelearla. Hay momentos buenos y momentos malos”.

Explicó que en su caso tiene “cuatro pivotes funcionando, y hacemos riego pero me quedé sin agua, así que tampoco puedo regar. No pude terminar todos los maíces porque no llovió nada. Hubo meses de 0 milímetros”, como junio y setiembre, “en pleno invierno tampoco llovió”, dijo.

Entonces, “si bien pasamos un invierno muy bueno, porque no hubo barro y las producciones fueron buenas en ese momento, no juntamos agua para nada. Hoy se secan los maíces, la soja, que son las que más resisten, el sorgo forrajero falló, hasta moha —que es muy difícil que no venga— se ha muerto. Es complicada la cosa”.

Alimentación de las vacas

Con relación a cómo está solucionando el tema de la alimentación de las vacas lecheras, Jorcín dijo que “se están gastando las reservas, las pocas que todavía quedan; en algunos tambos todavía hay algo. Se enfardó cola de trilla de los cultivos de invierno y estamos con eso. O sea que las vacas están comiendo paja con algún producto nuevo, que tiene proteínas y energía importante. Se mojan los fardos y la verdad que es un buen alimento. Con eso estamos ordeñando, aunque parezca mentira. Y después, 7 a 9 kilos de ración, porque las vacas las tenemos que ordeñar y no podemos dejar de producir. Está muy difícil”.

Sobre el déficit hídrico en Colonia, dijo que “hay zonas un poco mejor, como el oeste, que está un poco mejor que la zona este” del departamento. Lamentó que “hay soja que se ha perdido directamente. Maíces que se pican con un metro, un metro y poco de altura, sin choclos por supuesto. La calidad de las reservas para el año que viene no va a ser buena. Va a faltar volumen y calidad, así que va a ser un año bien difícil”.

La caja del productor lechero

Explicó que “la vaca de refugo vale menos. De U$S 1.200 que valía el año pasado, ahora apenas llega a U$S 700. Eso se nota en la caja del productor, sobre todo del productor lechero. Si bien el precio de la leche no ha bajado, los volúmenes que se están vendiendo vienen para atrás  día a día, y ahora es el momento de sacar muchísimas vacas, como las que van a parir en otoño, temprano, y eso hace que febrero, marzo, abril sean meses en los que va a faltar caja”.

Jorcín informó que “un fardo de paja está valiendo U$S 35 en la zona. Es un fardo de cola de trilla, ni pensar en un fardo de alfalfa, en un fardo de material mejor”. 

“Si el invierno acompaña un poco, vamos a tener verdeos, a producir de nuevo y la cosa va a cambiar”

Destacó que “se han hecho muchos galpones de cama caliente”, y por eso “las vacas han sufrido muchísimo menos y todavía están con buena leche”. Pero las vacas que sí han sufrido estos calores, “si no tienen buena sombra sufren, y si tiene sombra pasan debajo de la sombra y no comen, solo comen de noche. Lo que van a comer es alguna alfalfa que puede haber acá en la zona, pero es del palo, porque hojas no tiene”, detalló. 

Por lo tanto, enfatizó que se trata de “una situación delicada”, a la que “hay que ponerle mucho pienso, organización y planificación”. 

Agregó que “se está empezando a querer sembrar alguna avena, para tener algo temprano, pero hay tan poca humedad y tampoco entra la sembradora, así que está difícil”.

El seguro de la cama caliente

Sobre la actual remisión de su tambo, Jorcín dijo que “estamos en 10% o 12% por encima del año pasado, porque hemos hecho más galpones de cama caliente y eso ha repercutido en que la producción siga bien. Aparte, pasamos de dos a tres ordeñes en esos galpones, y eso te aumenta 6% o 7% más (la producción) de leche. Así que estamos entre 10% y 15% por encima de la remisión del año pasado”.

El futuro

El empresario afirmó que seguirá invirtiendo con ganas en agricultura y lechería, pero que “hay muchísima gente que vive de la lechería, algunos con pocas hectáreas, sufriéndola, pero con una vida digna, y creo que eso es algo bueno. Si bien somos muy llorones los tamberos y todo el mundo nos conoce como llorones”.

Finalmente Jorcín dijo que se “considera también agricultor” y que si bien ahora le está yendo mal, “no me puedo olvidar que tuve dos años excelentes. El año pasado fue económicamente el mejor de la historia, porque valía el ganado, valía la leche y los granos valían, y tuvimos muy buenos rindes. Entonces, no podemos quejarnos siempre. Fueron momentos muy buenos de cosecha, y ahora nos toca un período donde no estamos ganando plata”. 

“Con el tambo no estoy ganando plata, estoy conservando, porque pienso que si el precio sigue alrededor de U$S 0,40, y si el invierno acompaña un poco, vamos a tener verdeos y vamos a producir de nuevo, y la cosa va a cambiar. Así que hay que tener esperanza, soy muy optimista en este aspecto”, concluyó.

Escuche la entrevista completa:

 

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