El consignatario de ganado Gustavo Basso, comentó a Agronegocios Sarandí que los productores seguirán aliviando los campos de cara al invierno, vendiendo fundamentalmente las vacas que no quedaron preñadas.
Si no hay ningún cambio en la demanda internacional de carne, es probable que se sostenga el alto volumen de faena, consideró el consignatario de ganado Gustavo Basso, al ser consultado por Agronegocios Sarandí. De todos modos reconoció que seguramente se faenarán ganados con menor terminación y menos peso de carcasa.
“El número de animales no tendría por qué bajar, porque en la medida que se empiecen a tener los resultados de los diagnósticos de preñez, el productor irá aliviando los campos preparándose para el invierno. Tendremos un flujo de oferta importante de mucha vaca, desde la segunda quincena de marzo, porque el productor preferirá no tener en el campo las vacas que no estén preñadas y le dará destino de faena o para terminación”, dijo.
Basso estimó que gracias a la diversidad de mercados que tiene la industria frigorífica uruguaya para la carne, no habrá problemas en absorber un número importante de oferta de ganado, y eso le vendrá muy bien al productor para afrontar la escasez de fibra que habrá en invierno.
Consultado por los rendimientos de los ganados en la faena, dijo que vienen siendo normales, dentro de lo esperable, y que no llaman la atención. Agregó que los ganados que sufrieron problemas de deshidratación y que perdieron kilos, siempre tienen algún punto menos de rendimiento, pero destacó que el productor tiene gran ingenio para administrar la escasez y todavía se encuentran ganados con buena terminación, cosa que sorprende en este momento.
Precios
Después de un ciclo extenso con tendencia a la suba, que se venía dando desde fines de año pasado, por primera vez el precio del ganado para faena muestra un grado de estabilidad o incluso una pequeña baja. Ese freno ocurre porque la industria está mejor posicionada, con entradas más largas, a pesar de que hay matices tanto en las entradas como en los precios, señaló Basso.
“Actualmente las entradas se concretan en 10 o 15 días, y cuando la industria toma esa posición más tranquila, empieza a buscar acomodar los precios de la materia prima. Hubo algún negocio que no se pudo concretar, porque no se mantuvieron los precios que el productor pretendía”, señaló.
Por los novillos, que hasta hace algunos días se vendían a U$S 3,20 por kilo a la carne, la industria ofrece U$S 3,15.
Pero también ocurre que hay productores más preocupados con la fecha de ingreso de sus ganados a faena que con los precios, y en función de eso los frigoríficos sostienen el actual nivel de actividad, que es sorprendente.
“Seguramente sea difícil encontrar en la historia de Uruguay un bimestre enero-febrero con el volumen de faena y tan parejo como el de este año. Eso fue muy bueno porque permitió aflojar los campos, y esperamos que continúe esta fluidez; si se puede incrementar mejor, porque capacidad para hacerlo hay, así se puede absorber la mejor cantidad de ganado posible antes del invierno”, comentó el consignatario de Florida.
Parámetros de referencia
Por los novillos, que hasta hace algunos días se vendían a U$S 3,20 por kilo a la carne, la industria ofrece U$S 3,15.
Lo mismo ocurre con las vacas, por las que se pagó U$S 3,00 por kilo ahora se ofrecen precios que se ubican entre U$S 2,90 y U$S 2,95; y las vaquillonas, que eran muy demandadas para el abasto, que se vendían a precios que se ubicaban entre U$S 3,10 y U$S 3,15, ahora cotizan entre U$S 3,05 y U$S 3,10.
“A cada negocio hay que trabajarlo, hay que proponerlo, y en función del flete y de la terminación se van concretando. Los ganados especiales son cada vez más escasos, y quienes los tienen pretenden mejores precios; por eso quien los necesite tendrá que hacer algún esfuerzo. En muchos casos terminan siendo más baratos que los generales”, dijo Basso.
