Facundo Ruvira, de Tops Fray Marcos, razonó que hay compradores que toleran pagar los actuales precios y otros no, y eso puede hacer que el mercado busque un nuevo equilibrio.
A los actuales niveles de precios es riesgoso para el productor esperar más subas para la lana, opinó el gerente comercial de Tops Fray Marcos, Facundo Ruvira, durante una entrevista con Agronegocios Sarandí.
Recordó que en la zafra pasada se vio claramente que fue más fácil vender lotes de lana fina que de lanas gruesas, por la estructura o el nuevo equilibrio entre la oferta reducida y buena demanda de lanas finas.
Pero alertó que si las subas son muy fuertes los mercados se ajustarán. Razonó que hay segmentos que pueden tolerar una lana a US$ 9 por kilo en Uruguay o US$ 10 en Australia, y otros no. Estos últimos demandarán otro tipo de productos y de esa forma el mercado puede encontrar un nuevo equilibrio.
Repasó que en el mundo se producen 550 millones de kilos base limpia de lanas para vestimenta, de los cuales 350 millones tienen menos de 23 micras, y el resto entre 24 y 28 micras. La producción de esas lanas bajó fuerte en los últimos años.
Por otra parte ese mercado fue desarrollando nuevos productos, mientras que la innovación y promociones de lana mejoraron la demanda. Eso explica la firmeza estructural de precios de las lanas finas. Más allá de las subas y bajas que siempre tiene el mercado, hay fundamentos estructurales que hacen pensar que este cambio en la demanda por las lanas finas es estructural, afirmó.
En cuanto a las lanas gruesas agregó que la caída de producción fue menor, y hubo un pequeño aumento en los últimos años, que proviene de las razas carniceras o de más de 30 micras, por las que la demanda cayó fuerte.
“Si el productor intenta hacer un sistema mixto, lanero y carnicero, las opciones para Corriedale o Romney implican ingresar a sistemas de grifa verde, o certificaciones, con bajo nivel de pesticidas, por ejemplo. Puede haber un nicho para esas lanas, con una distancia importante de precios respecto al Merino, pero también respecto a las razas carniceras que cotizan alrededor de US$ 1,30 o US$ 1,50 por kilo”, comentó.
Ruvira señaló que Uruguay ofrece productos premium, y el mundo exige trazabilidad, además de condiciones ambientales y de buen manejo animal, planteos que son cada vez más exigentes.
“Primero apuntamos a la calidad de la lana, luego a mejorar la certificación y cosecha, ahora la certificación de procesos, y seguramente después venga algún nivel de trazabilidad, aunque en la lana será más difícil de aplicar que en la carne. Son tendencias que marcan claramente el camino”, reconoció.
El mercado local
El ejecutivo confirmó que Tops Fray Marcos hace negocios por todas las lanas. “El mercado de lanas gruesas estuvo muy parado, sobre todo en estos dos últimos años, porque se habían generado altos stocks en el mundo. Ahora se está reactivando lentamente, y esperamos que se movilicen stocks y haya negocios más fluidos, pero todavía no hay un movimiento muy grande”, informó.
Según Ruvira toda la lana tiene su uso, “no nos corresponde decir qué se tiene que producir, eso lo determinará cada productor en base a su estrategia y a su sistema; pero está claramente marcada la tendencia y los valores relativos de cada lana”, dijo.
Por otra parte analizó que el mercado se está segmentando en diferentes productos, por sus niveles, finura, calidad y origen. Dijo que el Indicador de Mercados del Este (IME) es una buena referencia pero representan una visión muy general. “En los últimos años la lana se segmentó y hay diferentes tendencias con el IME, a veces ocurre que el IME baja y los precios de algunos de estos segmentos suben”, alertó.
Importación
Respecto a la importación de lanas el gerente comercial de Tops Fray Marcos dijo que es una constante en Uruguay, y fue lo que posibilitó que la industria siga trabajando. Señaló que Uruguay exporta 50 millones de kilos base sucia, aunque en los últimos años fue algo menos, pero el país produce 25 millones de kilos. Expresó que la única manera de lograr esto es importando lo que falta.
Las importaciones se realizan de países de la región y en el caso de las lanas gruesas también se importa de otras regiones.