El doctor Rafael Carriquiry, del Instituto Plan Agropecuario, comentó a Agronegocios Sarandí que en la medida que pasan los años los productores dejan de vacunar, además de disturbios ambientales que le generan estrés a los vampiros, y eso hace que cada tanto aparezcan animales enfermos

¿La aparición de un nuevo foco de rabia paralítica generó alteraciones en la región?

La aparición de un foco de rabia paralítica no es algo inesperado. El diagnóstico de 2007 por primera vez en Uruguay identificó la presencia del virus en este ambiente. Lo que se espera es que cada tanto aparezca algún animal enfermo, porque la inmuno competencia de los animales disminuye, porque a medida que pasan los años los productores dejan de vacunar.

Pero estos nuevos focos también aparecen de la mano de factores ambientales. Cuando las colonias de vampiros sufren un estrés importante se da cierta reactivación del virus. Por ejemplo los procesos de cosecha forestal, de tala rasa, implican un disturbio ambiental muy severo, que generan alteraciones en el comportamiento de los vampiros.

Pero no hay que asociar los vampiros, o los murciélagos y la rabia con la forestación. Aunque están alrededor de una zona forestal no es consecuencia de la forestación.

¿Los vampiros buscan refugios como cuevas de piedra?

Claro, los murciélagos que viven en los árboles no son los vampiros, porque estos buscan otro tipo de refugios, como cuevas en las piedras, cerca de cursos de agua, cerros.

¿Hasta ahora hubo un solo caso con un vacuno muerto?

Hasta ahora hay confirmado un solo caso, aunque es probable que hayan más que no se diagnosticaron. Es poco probable que una enfermedad que está presente genere una sola muerte, así que es probable que haya más animales muertos que no se hayan reportado o que los productores consideraron que murieron por otras causas.

Se definió un área para que los productores vacunen…

Sí, la Dirección General de Servicios Ganaderos definió un área que va desde la Cuchilla Negra hasta la ruta 5 y del norte de la ruta 30 hasta Tacuarembó. Se les pide a los productores que vacunen y sobre todo si tienen sospechas de animales con esta enfermedad, con alteraciones en su comportamiento, dificultades para caminar o para alimentarse, y que en cuatro o cinco días mueren, avisen a un veterinario y a las autoridades sanitarias para que tomen las determinaciones del caso.

¿Hay que avisarle a la autoridad sanitaria antes de vacunar?

No, la vacunación es de libre uso, quienes quieran vacunar pueden hacerlo. Lo que sí es importante es vacunar los perros en todo el país, independientemente de este caso de rabia. Es parte de la tenencia responsable de perros. La gente suele olvidarse de la vacuna contra la rabia, porque es una enfermedad muy rara en Uruguay, desde hace 50 años que no se da en perros y en vacunos no se había dado hasta ahora.

Tampoco hay que esperar que haya una difusión masiva de la enfermedad. No hay que generar pánico, porque la única forma de que la rabia se contagie es a través de la mordedura de un animal enfermo.

Además es algo que ya se vivió en Uruguay

Vemos que hay ciclos de seis o siete años para que aparezca la enfermedad, que no está vinculada tanto a un ciclo biológico del virus sino a una vinculación con el ambiente, la gente, los vampiros. Lo esperable es que se repita. La diferencia con los casos de 2007 y 2008 es que ahora hay un dispositivo armado, equipos del Ministerio de Salud Pública que trabajan juntos con el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca; las colonias de vampiros están georeferenciadas y cuantificadas; hay un marco normativo y protocolos definidos que permiten que se actúe de forma correcta; y además ahora conocemos la enfermedad, porque en aquel momento nos había tomado muy por sorpresa.

Foto: TV10 Rivera

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