Con la cosecha de trigo entorno que lleva alrededor de 50% de avance de área, los resultados primarios en rendimiento y calidad vienen siendo dispares. Según el boletín semanal de Grupo Trigo, los rindes por hectárea van desde 1.000 hasta 4.000 kilos, en casos puntuales extremos. En promedio, hasta ahora, ronda los 2.400 kilos por hectárea, según técnicos consultados.
Los resultados en calidad parecen ser algo más auspiciosos, con Ph que ronda 80 y niveles de proteína aceptables.
Carolina Silveyra, técnica de Calmer, señaló que en la zona de Mercedes no han registrado problemas de calidad. “Génesis 2375 por ejemplo no ha registrado ningún problema de proteína ni de Ph”, señaló, a la vez que marcó también un mejor manejo en la fertilización.
Los rendimientos en promedio en su zona rondan los 3.000 kilos por hectárea, con extremos inferiores y otros que se despegan hacia arriba. En cuanto a calidad los ph se ubican alrededor de 80 y los datos de proteína, aunque más variados, se ubica en torno a 12.
A pesar de que el resultado en su zona viene siendo algo mejor a lo esperado previo al comienzo de la cosecha, los resultados en rendimiento todavía son insuficientes para cubrir los costos de producción.
Edgardo Nasta, técnico de Copagran Paysandú, con la trilla algo más avanzada (en torno a 70% del área) coincidió respecto a los datos de calidad aunque fue menos optimista sobre la productividad, con un rinde promedio que ronda los 2.200 kilos por hectárea.
Exportadores y operadores consultados por el boletín especializado Monitor Agrícola manejan una estimación preliminar de rendimiento aproximada a 2.800 kilos por hectárea, aunque aún resta avanzar con la cosecha en el sur del país.
Según el análisis de Monitor Agrícola, tomando el área estimada por de DIEA de 197.000 hectáreas de trigo, la producción alcanzaría las 550.000 toneladas en 2017/2018. De todos modos, hay cautela respecto al área que efectivamente fue sembrada, pos las dificultades que se generaron por cuestiones climáticas.